- Pilar
Consejos para un buen mantenimiento de las ventanas de aluminio
Las ventanas de aluminio cuentan con una gran resistencia y durabilidad que se ve incrementada si se realizan sencillas labores de limpieza y mantenimiento. Por eso, en este artículo vamos a abordar los consejos más útiles de mantenimiento que, sumados a un correcto uso de las ventanas harán que funcionen perfectamente durante el mayor tiempo posible.
En concreto, vamos a dividir estos consejos en 2 áreas principales del mantenimiento de ventanas de aluminio: la estética y correcta limpieza de las mismas, frente a trucos para mejorar su funcionamiento.
Estética: Consejos para una correcta limpieza de las ventanas de aluminio
La limpieza de las ventanas de aluminio no requiere de consejos más allá de utilizar productos suaves. El aluminio es muy fácil de limpiar, y con una mezcla de agua y jabón aplicados con un paño o superficie que no raye los materiales de la ventana será suficiente para mantenerlas relucientes.
Por otro lado, sí que se debe recordar incluir en la limpieza habitual de las ventanas de aluminio los raíles y puntos de drenaje de la misma, para evitar que se acumule agua en la ventana. Estos se deben secar con un trapo después de limpiarse.
Funcionamiento: Comprobación de la funcionalidad de la ventana
Para llevar a cabo un buen mantenimiento de una ventana de aluminio se debe comprobar periódicamente su funcionamiento. Para ello, sólo hay que atender a las funcionalidades básicas de la ventana:
Desplazamiento en el caso de las correderas
Sistema de apertura y cierre
Grado de fijación de las sujeciones del cristal al marco
Si el desplazamiento está ralentizado, la apertura o cierre no se realiza como el primer día o las bandas que sujetan el cristal presentan cualquier anomalía, hay que solucionarlo. Para ello, existen unos consejos u otros en función del tipo de ventana de aluminio en cuestión.
Mantenimiento de ventanas de aluminio correderas
El problema más común que suele aparecer en las ventanas correderas es que el deslizamiento no sea tan rápido y suave como al principio. Normalmente, esto se puede solventar con un sencillo mantenimiento que consiste en aplicar aceite para lubricar el mecanismo.
El aceite se debe aplicar tanto en los cojinetes o ruedas que permiten el desplazamiento, como en los mecanismos de cierre desde el interior de la hoja. Si la ventana es relativamente nueva, es probable que las ruedas se puedan graduar y ajustar apretando o aflojando los tornillos del área interior e inferior de la hoja.
Mantenimiento de ventanas de aluminio practicables y batientes
Los consejos para el buen mantenimiento de las ventanas de aluminio practicables, batientes, y oscilo-batientes, se centran en engrasar los herrajes y mecanismos de cierre y apertura, así como las manillas que controlan estos procesos.
Al igual que en el caso anterior, se debe usar lubricante en todas estas zonas, poniendo especial atención a las bisagras, así como a la comprobación de que todos los tornillos están ajustados y, en caso contrario, apretarlos.
Normalmente, con realizar estas tareas de lubricación en los herrajes anualmente suele ser suficiente para un perfecto mantenimiento de las ventanas de aluminio.